miércoles, 14 de noviembre de 2007

Error... dolor... horror... amor...


Pity, tenían razón: No pude liderar el puto grupo de inglés.
Creo que fue la desesperación, el tiempo o no sé qué. Pero nos equivocamos en una pregunta fácil (aunque lo calificaban como difícil). Siento que yo me equivoqué. Yo me siento mal. Todos confiaban en mí. Se suponía que esos 20 puntos eran fijos. De todas maneras, no íbamos a ganar... creo que no hay problema en eso. Pero que yo haya fallado, me jode, ¿entiendes? Me jode, porque mi nivel no es básico; me jode porque yo fui quien insistió en que la respuesta era tal y creo que no dejé que alguien más opinara o cambiara la respuesta.
Ya fue, Pity, era solo una competencia que no quiere decir mucho sobre mi nivel intelectual. ¡Pero haberme equivocado en tal estupidez!

Cambiando de tema, no hay nada más que decir, Pity.
Bueno, mañana son las olimpiadas deportivas y yo juego fútbol. Sí, sí... y prometo a todos los dioses del Olimpo que nuestro equipo de fútbol femenino ganará. No importa cómo. Si por juego, por penales o por moneda, pero ganamos. Y si por casualidad, por esas cosas del destino, hago un gol, dedicaré ese gol al amor de mi vida, o sea, al alcohol... jajajaja, mentira... a mi niña.
Lo veo muy difícil, Pity, porque no he practicado mucho con el equipo. Nadie me hacía caso, bueno, tampoco decía algo. Jejeje.
Ya me veo jugando. Ah, reconozco que me emociona jugar fútbol, siempre me ha emocionado. ¿Sabes por qué? Porque no puedo evitar jugar bien. Jejeje. Está en mis venas.

Por cierto, Pity, me gustaría conocerte. No sé, me caes bien y... y... tal vez... ya sabes.
Mierda, estoy más loca que una cabra: trato de ligar a mi "diario".
Pity, no te enojes, pero tú no existes.

Pity, ¿no crees que Michigan se ve bien gay en esa foto? Parece, pero no es. Su problema es que es muy hermoso. Sí, hermoso, pero malo. No quiero contar esa historia. Ya me dio flojera. Ahora iré a ver TV y a olvidarme de mi error.

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