martes, 20 de noviembre de 2007

G.P.P

Me gustaba estar con ella porque jamás prestaba atención a lo que le decía. Me gustaba su mirada ausente, me gustaba que no mostrase fastidio ante mi presencia.
Para ella, yo era una niña que no entendía nunca nada y siempre se estaba enojando de todo. No me enojaba porque quería, lo hacía porque me sentía olvidada.
A veces no sé por qué me decía que me amaba, a veces parecía que sí me quisiera. No la entendí, pero ahora sé lo que ella sintió por mí: pena. Y algo más que eso; creo que, a pesar de sentir lástima por mí, se aprovechaba de mi ingenuidad y, para sentirse mejor, sentía pena por mí.
La odié. No era para menos, pues me engañó. O eso quise creer. He vivido mucho tiempo con esa idea y creo que es la mejor. Tengo cierta "manía" de inventar cosas para hacerme sentir mal. Creo que no tiene sentido estar bien todo el tiempo, es más divertido sufrir. Me siento más viva cuando sufro, cuando siento dolor.

Hay una frase que dice: "The magic of first love is our ignorance that it can ever end". Es tan verdadero. Ahora siento el amor de una manera distinta, ya no lo siento como cuando tenía 14 y estaba estúpidamente enamorada de ella. Ahora sé que acabará y, aunque sé que no debo pensar en eso, lo hago. Mejor es no pensar en eso, así el final llegará cuando menos lo pienses y te joderá horriblemente que será tan placentero.

Recuerdo el día en que me convencí de que ella ya no quería saber de mí nunca más, el 31 de diciembre del 2005. Me pasé toda la mañana llorando, mi hermana me dio un sermón y yo no quise creer nada. Estuve triste todo el día y no me animaba la idea de que era fin de año. No, creo que nadie estaba bien en mi casa. Unos días antes había muerto mi abuelo.
Era deprimente.
Lloré muchas veces más. Lloré porque me di cuenta que había sido tonta. Pero qué podía esperar si la conocí a los 13 y solo era una niña.
¡Fui tan patética! Un día de diciembre del 2005, me puse a llorar en el cole y una amiga me consolaba. Creo que le desesperaba que estuviese llorando en medio de la clase, sentí que quería darme una bofetada.

La amé demasiado, fue difícil olvidarla... Pero no me quedó otra, a pesar de que tenía esperanzas de que algún día todo volviese a ser como antes. No, lo mejor que hice fue olvidarla.
Estoy satisfecha de eso.
Satisfecha porque sé que no volverá a pasar entre ella y yo, porque cuando la veo por ahí solo recuerdo lo buena que era tirando, porque...digo que lo superé aunque no completamente (sigo recordándola), es mejor creer que sí.

A pesar de todo lo que me hizo sufrir, me gustaba que se hiciera a la tonta conmigo, que me hiciese sentir "importante", que no me hiciese caso cuando quería pelear con ella........ Que me haya hecho sentir viva por mucho tiempo, y luego por haberme permitido saber lo que es estar "muerta".

1 comentario:

Unknown dijo...

Come se questo tempo non fasse
passato mai
dove siamo stati
cosa siamo poi
confinanti di cuore
solo che ognuno
sta
dietro gli steccati
degli orgogli suoi
sto pensando a te
sto pensando a noi
...